El pasado viernes, los trabajadores de OpenAI en San Francisco se vieron obligados a permanecer en sus oficinas tras recibir una alerta de seguridad sobre una amenaza de un individuo vinculado a la organización Stop AI. Este suceso generó preocupación entre los empleados, quienes fueron instruidos sobre cómo proceder ante esta situación inesperada.
Según un mensaje compartido en la plataforma interna de comunicación de la empresa, un miembro del equipo advirtió que un antiguo asociado de Stop AI había manifestado interés en causar daño físico a los empleados.
Además, se mencionó que este individuo había visitado anteriormente las instalaciones de OpenAI en San Francisco.
Detalles del incidente
La situación escaló cuando, alrededor de las 11 de la mañana, la policía de San Francisco recibió una llamada al 911 reportando a un hombre que supuestamente estaba realizando amenazas y planeando hacer daño a otros en la dirección 550 Terry Francois Boulevard, muy cerca de las oficinas de OpenAI, en el barrio de Mission Bay.
La aplicación de seguimiento del crimen, Citizen, registró esta información y compartió un audio de la radio policial en el que se identificaba al sospechoso por su nombre, sugiriendo que había adquirido armas con la intención de atacar otras ubicaciones de OpenAI.
Reacciones de la comunidad y OpenAI
Horas antes del incidente, el individuo señalado había publicado en sus redes sociales que ya no formaba parte de Stop AI. En respuesta a los acontecimientos, la organización emitió un comunicado a WIRED, que luego fue difundido en la plataforma X, donde negaron cualquier relación con las acciones del individuo y reafirmaron su compromiso con la no violencia.
La situación generó un gran revuelo. WIRED intentó contactar al hombre mencionado, aunque no se obtuvo respuesta inmediata. La policía de San Francisco también se mostró reservada ante la solicitud de comentarios, mientras que OpenAI no ofreció declaraciones antes de la publicación de esta noticia.
Precauciones de seguridad en la empresa
Mientras tanto, la comunicación interna de OpenAI incluyó imágenes del sospechoso y recomendaciones para los empleados, tales como quitarse las credenciales de acceso al salir del edificio y evitar usar prendas con el logotipo de la empresa.
Un miembro destacado del equipo de seguridad global comunicó que, en ese momento, no había indicios de una amenaza activa, aunque la situación seguía bajo evaluación y se estaban implementando precauciones adecuadas.
Contexto de las protestas contra la inteligencia artificial
Este episodio forma parte de un patrón más amplio de protestas contra el desarrollo de la inteligencia artificial. En los últimos años, grupos como Stop AI, No AGI y Pause AI han organizado manifestaciones en las afueras de las oficinas de varias empresas tecnológicas, incluyendo OpenAI y Anthropic. Estas acciones se han motivado por el temor a que el avance descontrolado de la inteligencia artificial pueda tener consecuencias negativas para la humanidad.
En febrero, los manifestantes fueron arrestados después de intentar bloquear las puertas de la oficina de OpenAI en Mission Bay. Recientemente, Stop AI declaró que su defensor público era el mismo hombre que interrumpió una entrevista en el escenario para interpelar al CEO de OpenAI, Sam Altman, en un evento celebrado en San Francisco.
Perspectivas sobre la inteligencia artificial
En un comunicado anterior de Pause AI, el individuo involucrado en el reciente incidente se describía como un organizador y expresó su profunda preocupación sobre el futuro, diciendo que consideraría su vida insoportable si las tecnologías de inteligencia artificial reemplazaran a los humanos en la realización de descubrimientos científicos y en el ámbito laboral. Afirmó: “Pause AI puede parecer radical para muchos en la comunidad tecnológica, pero no lo es para el público en general, ni tampoco lo es detener por completo el desarrollo de la AGI”.

