El 29 de agosto de 2023, el gobierno de Estados Unidos eliminó una regla de 87 años que permitía a los estadounidenses importar paquetes pequeños sin pagar aranceles. Esta política, conocida como la exención de de minimis, permitía que los envíos con un valor inferior a 800 dólares ingresaran al país sin tributos. La decisión generó un gran revuelo en la industria del comercio electrónico y la logística global, especialmente entre los pequeños vendedores que dependen de estas importaciones.
Detalles sobre la eliminación de de minimis
El fin de la exención de de minimis ha sido objeto de debate durante años, pero su implementación ha tomado por sorpresa a muchos. Esta medida afecta particularmente a los pequeños comerciantes que venden productos a través de plataformas como Etsy. Un vendedor independiente en Ucrania, Denys, se encontró en una situación complicada luego de que un pedido realizado antes de la fecha límite aún no había llegado. Denys explicó que su paquete se quedó atrapado en un “vórtice burocrático” tras el cierre de la exención, ya que las agencias de aduanas no habían establecido procedimientos claros para el seguimiento de paquetes pequeños.
El valor de mi pedido era inferior a 40 dólares, muy por debajo del umbral anterior, pero debido a interrupciones en el procesamiento, ahora está sujeto a las tarifas específicas por país impuestas por el gobierno de Trump. Aunque Denys está dispuesto a absorber los costos adicionales para mantener la satisfacción de sus clientes internacionales, esta situación recalca una dura realidad: los pequeños propietarios de negocios son los que más sufren las consecuencias de estas nuevas regulaciones.
El impacto en el comercio electrónico global
Las grandes plataformas de comercio electrónico en China, como Shein y Temu, ya habían ajustado sus estrategias logísticas antes de la eliminación de la exención. Desde mayo, los paquetes de origen chino ya no calificaban para la exención, lo que les dio tiempo para adaptarse a las nuevas reglas. A pesar de esto, los informes indican que sus ventas globales han aumentado en comparación con años anteriores, lo que sugiere que han encontrado formas de seguir siendo competitivos.
En contraste, los pequeños vendedores como Denys tienen menos recursos para adaptarse rápidamente a los cambios en la política comercial. Según Seema Shah, vicepresidenta de investigación en Sensor Tower, las empresas chinas han reducido significativamente su gasto en publicidad en Estados Unidos, pero han redirigido sus esfuerzos hacia mercados donde los riesgos geopolíticos son menores. Este cambio de estrategia podría permitirles mantener su crecimiento mientras que los vendedores independientes luchan por sobrevivir.
Consecuencias para los consumidores y pequeños vendedores
Con la eliminación de de minimis, muchos consumidores estadounidenses podrían reconsiderar sus compras de productos artesanales y no esenciales del extranjero. Juozas Kaziukėnas, analista de plataformas de comercio electrónico, señala que esto afectará principalmente a las compras impulsivas y a productos que no son de primera necesidad. Esto podría llevar a una disminución en las ventas para los pequeños vendedores que dependen de la internacionalización de sus productos.
Mientras tanto, Denys se enfrenta a la realidad de que podría tener que aumentar los precios de sus productos para hacer frente a las nuevas tarifas. A pesar de que su situación en Ucrania es menos caótica que en otras regiones afectadas por las políticas de Trump, la incertidumbre es palpable. La necesidad de adaptarse a un nuevo ecosistema comercial podría forzar a muchos pequeños vendedores a cerrar sus puertas.
Además, la experiencia de compra de productos internacionales se ve amenazada, ya que los consumidores podrían verse obligados a optar por opciones más locales debido a las tarifas. La situación es un recordatorio de cómo las decisiones políticas pueden tener un impacto directo en la economía global y en las vidas de pequeños emprendedores.