Las tensiones entre Estados Unidos y la Unión Europea están en aumento a raíz de la Ley de Servicios Digitales (DSA), una legislación crucial que regula las plataformas tecnológicas. El pasado 21 de agosto, la Comisión Federal de Comercio (FTC) lanzó una carta contundente a varias empresas tecnológicas, entre ellas Google, Meta, Amazon, Microsoft y Apple, advirtiendo que la DSA no puede aplicarse si pone en riesgo la libertad de expresión y, sobre todo, la seguridad de los ciudadanos estadounidenses.
Advertencias de la FTC sobre la libertad de expresión
La carta, firmada por el presidente de la FTC, Andrew Ferguson, comienza con una clara referencia a la Primera Enmienda de la Constitución de EE. UU., que protege la libertad de expresión. Ferguson expresó: «Las plataformas en línea se han convertido en el centro del debate público, y la censura en línea generalizada en los últimos años ha indignado al pueblo estadounidense». Esta declaración resalta las preocupaciones sobre la censura que han enfrentado muchos ciudadanos, quienes se han visto bloqueados y censurados por expresar opiniones que no son bien recibidas por la élite tecnológica de Silicon Valley. ¿No te parece que todos deberían poder opinar libremente?
El contexto se complica aún más con la intención de la administración de Trump de revertir las políticas actuales, lo que ha desencadenado un ataque hacia lo que se considera «poderes extranjeros», poniendo el foco en la DSA y la Ley de Seguridad en Línea. En la carta, se menciona indirectamente el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la UE, sugiriendo que sus medidas podrían estar diseñadas para imponer censura y debilitar la encriptación de extremo a extremo, lo que podría resultar en una merma de las libertades de los estadounidenses.
Cumplimiento y seguridad de los datos
La FTC solicitó específicamente a las 13 empresas que informaran sobre cómo planean cumplir con los requisitos regulatorios internacionales que consideran inadecuados. Se estableció un plazo hasta el 28 de agosto para programar una reunión. Además, se recordó a estas empresas sus obligaciones bajo la Sección 5 de la Ley de la Comisión Federal de Comercio, que prohíbe prácticas desleales o engañosas que puedan distorsionar el mercado o comprometer la seguridad.
En el ámbito de la seguridad, la FTC enfatiza la importancia de la encriptación de extremo a extremo. Ferguson advirtió que «las empresas que prometen que su servicio es seguro o encriptado, pero no utilizan encriptación de extremo a extremo donde sea apropiado, pueden estar engañando a los consumidores que razonablemente esperan este nivel de privacidad». Asimismo, subrayó que la falta de implementación de estas medidas podría considerarse una práctica desleal. ¿Realmente podemos confiar en las plataformas si no garantizan nuestra seguridad?
Reacciones y el futuro de la regulación digital
Ferguson también utilizó Twitter para advertir que, si las empresas censuran a los estadounidenses o debilitan la privacidad y la seguridad de las comunicaciones a solicitud de una potencia extranjera, no dudará en hacer cumplir la ley. Esta postura decidida marca un giro significativo en la política de regulación tecnológica en EE. UU.
Guido Scorza, miembro de la Autoridad de Protección de Datos de Italia, comentó sobre la situación, afirmando que «en una sociedad global, las superposiciones y las interferencias entre diferentes sistemas legales son naturales». Scorza destacó que, ante discrepancias significativas, corresponderá al gobierno de EE. UU. y a la Comisión Europea identificar medidas correctivas que garanticen la soberanía digital de cada país.
El debate sobre la regulación de plataformas digitales está lejos de resolverse. Con la creciente presión sobre la privacidad y la libertad de expresión, el futuro de la Ley de Servicios Digitales y su implementación en el contexto estadounidense estará bajo un intenso escrutinio. ¿Estamos realmente preparados para enfrentar los desafíos que se avecinan en este nuevo panorama digital?