Uno de los mayores retos que enfrentan los padres en la actualidad es lograr que sus hijos se desconecten de las pantallas que los han absorbido durante horas. La sensación de culpa puede ser abrumadora, sobre todo si sientes que has contribuido a esta situación. Sin embargo, hay esperanza. Establecer límites en el uso de dispositivos es fundamental y, aunque parezca complicado, es posible hacer un reinicio en el comportamiento digital de nuestros hijos.
El inicio de un nuevo año puede ser el momento ideal para implementar cambios significativos. Es vital que los padres comprendan que no se trata de una lucha, sino de un esfuerzo colaborativo. Como bien señala Catherine Price, coautora de The Amazing Generation, nuestro verdadero objetivo es que tanto padres como hijos tengamos vidas significativas, repletas de conexiones reales.
Estrategias para limitar el tiempo de pantalla
Iniciar este proceso requiere conversaciones abiertas sobre cómo el uso de dispositivos impacta a cada miembro de la familia.
Muchos padres caen en el error de abordar el tema desde una posición autoritaria. Sin embargo, es más efectivo dialogar sobre las emociones y experiencias que cada uno vive en relación a las pantallas.
Price subraya la necesidad de que los padres reflexionen sobre sus propios hábitos digitales. Un estudio reciente de las Girl Scouts revela que más del 50% de los niños siente que no puede captar la atención de sus padres, quienes están demasiado ocupados con sus teléfonos.
Este dato resalta la importancia de ser un modelo a seguir en el uso responsable de la tecnología.
Analiza tus hábitos
Para tener una comprensión más clara de los patrones de uso, Price sugiere que los padres revisen los informes de tiempo de pantalla que ofrecen sus dispositivos. A menudo, los padres subestiman cuánto tiempo pasan en ciertas aplicaciones, lo que puede influir en la percepción que los niños tienen sobre el tiempo que ellos mismos pasan conectados.
Imagina que piensas que solo has pasado una hora en tu teléfono, pero al revisar, te das cuenta de que varias horas fueron dedicadas a aplicaciones como TikTok o WhatsApp. Esta información puede ser un llamado de atención que te ayude a modificar tus hábitos y, en consecuencia, los de tus hijos.
Estableciendo límites claros
Los expertos coinciden en que es fundamental que los padres colaboren con sus hijos para establecer nuevas pautas sobre el uso de dispositivos. Esto puede incluir reglas que, por ejemplo, prohíban el uso de smartphones y redes sociales hasta los 16 años, o que limiten el tiempo en determinadas plataformas.
La American Academy of Pediatrics brinda recursos adaptables que pueden ser de gran utilidad para diseñar un plan de medios familiar. Es esencial que el enfoque sea uniforme para todos los niños en el hogar, y que los padres se comprometan a cumplir con las expectativas establecidas, como, por ejemplo, tener comidas sin dispositivos.
Preparación para situaciones complicadas
En momentos de presión externa o crisis, puede ser tentador relajar las reglas. Contar con un plan de contingencia es fundamental. Por ejemplo, durante un vuelo, permitir que tu hijo juegue sin restricciones en su plataforma de juegos favorita puede parecer una solución rápida. Sin embargo, es crucial comunicar estas excepciones claramente para evitar confusiones.
Si necesitas distraer a tus hijos, considera reemplazar el tiempo de pantalla por programas de televisión seleccionados. De esta manera, tendrás más control sobre el contenido que consumen y podrás asegurarte de que sea de calidad.
Fomentando alternativas saludables
Es esencial que los padres comprendan que el aburrimiento forma parte de la vida infantil y no siempre tiene una connotación negativa. Sarah Keating, vicepresidenta de Girl Scouts, subraya la importancia de que los adultos se sientan cómodos permitiendo que sus hijos experimenten momentos de inactividad.
Para reducir la frustración que puede surgir de esta falta de estímulo, los padres pueden proponer alternativas que mantengan a los niños activos y comprometidos. Para los más pequeños, opciones como bloques de construcción o materiales de arte son ideales. En el caso de los adolescentes, actividades como libros de manualidades o el crochet pueden resultar altamente atractivas.
Fomentando la interacción social
Es fundamental que los padres apoyen a sus hijos en la búsqueda de alternativas para interactuar sin la dependencia de las redes sociales. Una estrategia efectiva es sugerirles que elaboren una lista de actividades que les gustaría experimentar, en lugar de dedicarse al tiempo en línea. También es crucial recordarles que aún cuentan con opciones como un teléfono básico, que les permite comunicarse con amigos sin la sobrecarga constante de las redes.
El propósito de disminuir el tiempo de pantalla no se limita a reducir la exposición a dispositivos, sino que busca enriquecer la vida de nuestros hijos. Como destaca Price, recalibrar el tiempo de pantalla implica ayudar a los niños a redescubrir la alegría de vivir plenamente fuera del ámbito digital.


