¡Última hora! En un giro inesperado, la fiscal general de EE. UU., Pam Bondi, ha comunicado a al menos diez gigantes de la tecnología, entre ellos Apple, Microsoft, Amazon y Google, que no enfrentarán cargos por respaldar a TikTok. Esto ocurre a pesar de la prohibición federal impuesta a la popular aplicación de videos. Esta información ha salido a la luz gracias a cartas que se han divulgado recientemente.
¿Qué hay detrás de la exención de responsabilidad?
Las cartas, que se hicieron públicas el jueves, revelan que Bondi, siguiendo las órdenes del expresidente Donald Trump, ha decidido no hacer cumplir una ley aprobada por el Congreso el año pasado. Esta legislación establece a TikTok como un riesgo para la seguridad nacional, debido a sus vínculos con China, y prohíbe a las empresas distribuir la aplicación entre los consumidores estadounidenses. Sin embargo, TikTok podría sortear esta prohibición si logra disminuir la propiedad de entidades chinas en sus operaciones dentro de EE. UU.
Las comunicaciones iniciales se enviaron el 30 de enero a empresas como Microsoft, Google y Apple. En una de estas cartas, el entonces fiscal general interino, James McHenry, afirmó: “Google no ha cometido ninguna violación de la Ley y no ha incurrido en ninguna responsabilidad durante el período cubierto”. Esto sugiere que Google puede seguir ofreciendo servicios a TikTok sin infringir la ley.
Bondi asumió su cargo a principios de febrero y, poco después, recibió cartas de Google y Apple. En sus respuestas, Bondi aseguró que el Departamento de Justicia renunciaba de manera irrevocable a cualquier reclamación que pudiera tener contra estas empresas por violar la prohibición de TikTok. ¿No es interesante cómo se desarrollan estas situaciones en el marco legal?
La evolución del caso TikTok
En marzo, tras una consulta de Microsoft, la compañía también recibió una carta similar que renunciaba a cualquier reclamación en su contra. Este mismo tipo de redacción se utilizó en cartas enviadas a Amazon, Digital Realty y T-Mobile. Esta cadena de comunicaciones ha generado dudas sobre la legalidad de las decisiones de la administración, especialmente dado que la aplicación fue retirada brevemente de las tiendas de aplicaciones de EE. UU. por un período de 26 días antes de regresar.
La situación se complica aún más con la extensión del plazo de negociación para la venta de TikTok, ordenada por Trump, lo que ha llevado a nuevos intercambios de cartas en abril. Algunas de ellas mencionaban la disposición de renunciar a las reclamaciones, pero únicamente las dirigidas a Apple y Google incluían la declaración de renuncia irrevocable. ¿Qué te parece todo esto? ¿Crees que estas decisiones están realmente fundamentadas?
Repercusiones legales y la lucha por la información
Tony Tan, un ingeniero de software de Silicon Valley, fue quien solicitó estas cartas bajo la Ley de Libertad de Información. Su demanda surge de la preocupación de que los compromisos de Bondi podrían no ser vinculantes, dejando a las empresas tecnológicas en una situación precaria ante posibles acciones legales futuras por parte de Trump o de cualquier otro presidente. Tan ha presentado una demanda contra Google, acusando a la empresa matriz de ocultar información respecto a su decisión de continuar distribuyendo TikTok en su tienda de aplicaciones.
Las implicaciones de este caso son enormes, ya que si se determina que las empresas han violado la prohibición, podrían enfrentar multas millonarias. Hasta ahora, Google y otras compañías no han respondido a las solicitudes de comentarios sobre estas cartas y las posibles consecuencias legales que se avecinan. ¿Qué opinas sobre la transparencia en estos casos? ¿Deberían las empresas ser más abiertas con el público?