Un reciente informe de seguridad ha revelado la presencia de radios no documentadas en ciertos inversores de potencia y sistemas de gestión de baterías (BMS) utilizados en equipos de infraestructura vial en Estados Unidos. Este descubrimiento, emitido por la Administración Federal de Carreteras, ha levantado serias preocupaciones sobre el posible uso malintencionado de estos dispositivos, que podrían permitir manipulaciones remotas o el robo de datos.
Detalles del descubrimiento
La Administración Federal de Carreteras de EE. UU. emitió un aviso de seguridad el mes pasado, advirtiendo sobre la presencia de estos dispositivos no autorizados. Aún se desconoce quién los instaló y con qué propósito, pero se especula que podrían ser utilizados para sabotear la infraestructura vial o comprometer la seguridad de los datos. Los equipos afectados incluyen señales de tráfico, cámaras, estaciones meteorológicas y cargadores de vehículos eléctricos, todos ellos vitales para la seguridad y eficiencia del tráfico en las carreteras.
Las autoridades locales han sido instruidas para realizar un inventario de todos los inversores instalados en las autopistas y utilizar tecnología de análisis de espectro para detectar comunicaciones no autorizadas. En caso de encontrar radios sospechosas, se recomienda desactivarlas y retirarlas inmediatamente, además de asegurar que las redes sean adecuadamente segmentadas para prevenir accesos no autorizados.
Implicaciones y reacciones
Esta revelación ha suscitado preocupaciones sobre la seguridad nacional, especialmente dado que muchos de los inversores identificados fueron fabricados en China. La Embajada china en Washington se pronunció en contra de lo que considera una distorsión de los logros de su país en infraestructura energética. Esta no es la primera vez que China se encuentra en el centro de una controversia relacionada con espionaje cibernético. En el pasado, se han planteado inquietudes sobre empresas como Huawei y ZTE, acusadas de colaborar con el gobierno chino para el espionaje.
China ha negado consistentemente estas acusaciones, incluso ofreciendo abrir su código fuente para auditorías europeas durante el proceso de instalación. La situación actual plantea un dilema sobre la seguridad de la infraestructura crítica de EE. UU. y la forma en que se gestionan las relaciones con los fabricantes extranjeros.
Próximos pasos y recomendaciones
Con la creciente preocupación por la seguridad de la infraestructura vial, se espera que la Administración Federal de Carreteras continúe monitoreando la situación de cerca. Los funcionarios están instando a una revisión exhaustiva de los sistemas afectados y a la implementación de medidas de seguridad más estrictas para prevenir futuros incidentes. Esta alerta podría dar pie a un debate más amplio sobre la seguridad de las tecnologías importadas y la necesidad de mayor transparencia en la cadena de suministro.
En resumen, el descubrimiento de radios no documentadas en inversores de potencia resalta la vulnerabilidad de la infraestructura crítica en EE. UU. y la necesidad urgente de abordar estas preocupaciones de seguridad antes de que se conviertan en una amenaza real.