Lauren Kolodny, socia de Acrew Capital, es una apasionada defensora del poder transformador de la tecnología en el ámbito financiero. Su trayectoria como inversora está llena de decisiones valientes, como su temprano apoyo a Chime, un neobanco que, en sus inicios, enfrentaba grandes retos para captar la atención de los inversores. ¿Te imaginas arriesgar $9 millones en 2016 en un proyecto tan incierto? Esa apuesta fue clave para el crecimiento de la compañía, que recientemente logró salir a bolsa con una impresionante valoración de $14.5 mil millones.
El desafío de las liquidaciones de herencias
Kolodny, quien ha sido reconocida en la lista Midas de Forbes durante tres años consecutivos, sigue firme en su compromiso de invertir en soluciones tecnológicas que permitan a los consumidores aprovechar al máximo sus recursos. Su más reciente movimiento: $20 millones en Alix, una startup que utiliza la inteligencia artificial para agilizar el complicado proceso de liquidación de herencias.
La fundadora de Alix, Alexandra Mysoor, vivió en carne propia lo complicado que puede ser liquidar un patrimonio familiar. Tras ayudar a una amiga a gestionar los asuntos de su madre fallecida, Mysoor se dio cuenta de que dedicó 900 horas y 18 meses a tareas como la transferencia de activos y la cancelación de cuentas. “Me sorprendió que este proceso fuera tan complicado”, confesó. “Es un sistema basado en papel. Es arcaico. Estás buscando listas de tareas en Google que no sirven de nada y llamando a abogados que solo hacen una pequeña parte del trabajo, ¡y sus honorarios son exorbitantes!”
Una solución impulsada por inteligencia artificial
La experiencia de Mysoor la llevó a pensar que muchos de los aspectos más tediosos de la administración de fideicomisos, como escanear y extraer datos de documentos o comunicarse con entidades bancarias, podrían ser gestionados por agentes de inteligencia artificial. Al conocer a Mysoor y su enfoque innovador, Kolodny se sintió profundamente identificada con el desafío que Alix pretende resolver.
Kolodny se percató de que, aunque se estima que billones de dólares se transferirán a las generaciones millennial y Z en las próximas dos décadas, la carga del papeleo asociado a la liquidación de herencias sigue recayendo en quienes están de luto. A pesar de que existen startups como Empathy que ofrecen asistencia para cerrar cuentas durante el duelo, Kolodny notó que no había empresas que brindaran un servicio integral de liquidación de herencias. ¿Por qué es tan complicado?
Un nuevo paradigma en servicios financieros
“¿Cómo es posible que exista un problema tan complicado que involucra tanta gestión de proyectos y no haya servicios significativos al respecto?”, se cuestionó Kolodny. “Fue un verdadero momento de revelación para mí. Este es exactamente el tipo de problema que la inteligencia artificial debería resolver”. Kolodny está convencida de que Alix es una de las primeras de muchas startups impulsadas por inteligencia artificial que democratizarán los servicios financieros y administrativos, que históricamente han estado reservados para los más privilegiados.
El modelo de tarifas de Alix es del 1% del valor del patrimonio. Sin embargo, para herencias inferiores a $1 millón, los clientes pueden esperar pagar entre $9,000 y $12,000, dependiendo de la complejidad del patrimonio. Con esta nueva propuesta, Alix promete aliviar la carga de las liquidaciones de herencias, ofreciendo un servicio más accesible y eficiente a quienes enfrentan la difícil tarea de lidiar con la pérdida de un ser querido.