La startup de tractores eléctricos y autónomos, Monarch Tractor, está atravesando un momento crítico. Recientemente, la compañía notificó a sus empleados sobre la posibilidad de despidos masivos, que podrían afectar a más de 100 trabajadores, e incluso mencionó la posibilidad de un cierre total de operaciones. Esta noticia llega tras varias rondas de recortes en su plantilla, tanto en sus instalaciones en California como en sus equipos en India y Singapur.
Fundada en 2018 por un grupo que incluye a un exejecutivo de Tesla y a Carlo Mondavi, un miembro de una célebre familia vitivinícola, Monarch Tractor ha recaudado más de 220 millones de dólares en financiamiento. Su objetivo era desarrollar tractores autónomos que pudieran operar en viñedos y granjas de frutas, ofreciendo una alternativa sin conductor. Sin embargo, la realidad ha sido más complicada de lo esperado.
Desafíos que enfrenta Monarch Tractor
Desde que lanzó su primer modelo, Monarch Tractor ha vendido aproximadamente 500 tractores. A pesar de este logro, la empresa anunció un proceso de reestructuración a finales de, buscando diversificar su uso en otros sectores, como la ganadería y el mantenimiento de campos de golf. Sin embargo, el CEO Praveen Penmesta ha señalado que la empresa ahora se enfocará más en ofrecer servicios de software y en licenciar su tecnología autónoma.
Descontento entre los clientes
Un claro indicio de las dificultades que enfrenta la compañía es la demanda presentada por Burks Tractor, un concesionario en Idaho. Este alegó que los tractores adquiridos no cumplían con las promesas de funcionamiento autónomo y presentaban defectos significativos. En su demanda, Burks Tractor alegó que los vehículos eran incapaces de operar de manera automática, lo que contradice las afirmaciones de Monarch sobre sus capacidades.
Un cambio de enfoque necesario
Ante la pérdida de su fabricante de contratos, Foxconn, la empresa ha comenzado a replantear su modelo de negocio. En un memo enviado a los empleados, se destacó que la nueva estrategia se centrará en lanzar soluciones de software como servicio (SaaS) para sus clientes, lo que podría desbloquear nuevas fuentes de ingresos. Sin embargo, los tiempos para esta transición son críticos y podrían poner en riesgo la continuidad de la empresa.
El mensaje a los empleados fue claro: Monarch podría despedir de forma permanente hasta 102 empleados. Aunque no se ha especificado la cantidad exacta de trabajadores que actualmente forman parte de la empresa, se sabe que Monarch contaba con aproximadamente 300 empleados a finales de, antes de realizar recortes significativos.
Lecciones para el futuro
La situación de Monarch Tractor sirve como un recordatorio de los retos que enfrentan las startups en el sector tecnológico, especialmente aquellas que dependen de la fabricación de hardware. La necesidad de asegurar acuerdos de manufactura sólidos y la importancia de validar el Product-Market Fit antes de escalar son lecciones cruciales para otros fundadores en este campo.
Mark Schwager, cofundador de la compañía, expresó en una publicación de LinkedIn que la visión inicial de Monarch era electrificar y automatizar la agricultura, haciéndola más rentable. Sin embargo, el camino hacia la realización de esta visión ha estado lleno de obstáculos, y la necesidad de adaptarse a un entorno en constante cambio es más evidente que nunca.
En resumen, el caso de Monarch Tractor pone de relieve la fragilidad de las startups de hardware en un mercado altamente competitivo. Adaptarse rápidamente y mantener una estrategia flexible son esenciales para navegar por las crisis que inevitablemente surgirán.
