Un movimiento estratégico en el sector farmacéutico
El gigante farmacéutico Regeneron ha anunciado su intención de adquirir la empresa de pruebas genéticas 23andMe por un total de $256 millones, tras una subasta de quiebra. Esta adquisición no solo representa un cambio significativo en la propiedad de 23andMe, sino que también plantea preguntas sobre el uso y la protección de los datos genéticos de millones de consumidores. Regeneron ha declarado que planea utilizar la base de datos de 23andMe, que incluye información genética y personal de aproximadamente 15 millones de clientes, para impulsar el descubrimiento de nuevos medicamentos.
Preocupaciones sobre la privacidad y la ética
La compra de 23andMe se produce en un contexto de creciente preocupación por la privacidad de los datos. La empresa había enfrentado problemas significativos, incluyendo una violación de datos que expuso la información privada y genética de 7 millones de clientes en 2023. Regeneron ha afirmado que priorizará la privacidad y la seguridad de los datos de los clientes de 23andMe, asegurando que se cumplirán las políticas de privacidad y las leyes pertinentes. Sin embargo, la historia reciente de 23andMe genera dudas sobre la capacidad de la empresa para manejar estos datos de manera ética y responsable.
El futuro de 23andMe y su legado
La fundadora y directora ejecutiva de 23andMe, Anne Wojcicki, renunció tras la caída de la empresa, lo que refleja la turbulenta situación que enfrenta la compañía. A pesar de su popularidad inicial, el interés de los consumidores en los kits de pruebas de ADN de 23andMe ha disminuido, lo que ha llevado a una caída drástica en el precio de sus acciones. Con la intervención de un tribunal de quiebras para supervisar la venta de los activos de 23andMe, existe la preocupación de que los datos de los clientes puedan ser vendidos a compradores poco éticos o a naciones adversarias. Regeneron, como comprador designado, ha expresado su compromiso de garantizar que se respeten las políticas de privacidad de 23andMe.
