Un vistazo al pasado de Google Glass
Durante una reciente entrevista en el evento Google I/O 2025, el cofundador de Google, Sergey Brin, reflexionó sobre los desafíos que enfrentó con el proyecto Google Glass. Afirmó que cometió numerosos errores, especialmente en lo que respecta a la comprensión de las cadenas de suministro de la electrónica de consumo. Brin admitió que no anticipó la complejidad de producir gafas inteligentes a un precio accesible, lo que contribuyó al fracaso inicial del proyecto.
El renacer de las gafas inteligentes
A pesar de los tropiezos pasados, Brin se mostró optimista sobre el futuro de las gafas inteligentes. En la misma entrevista, expresó su entusiasmo por el nuevo esfuerzo de Google en el desarrollo de las gafas Android XR, que se están creando en colaboración con socios estratégicos como Samsung y Xreal. Este nuevo enfoque, respaldado por la inteligencia artificial de DeepMind, promete ofrecer características innovadoras como traducciones en tiempo real y asistencia en navegación.
Colaboraciones estratégicas y nuevas inversiones
Google ha decidido invertir hasta 150 millones de dólares en una asociación con Warby Parker, una conocida empresa de óptica, para impulsar sus esfuerzos en el desarrollo de gafas inteligentes. Brin destacó que la experiencia de estas empresas en el sector de la óptica y la electrónica podría ayudar a resolver algunos de los problemas de la cadena de suministro que complicaron el proyecto original de Google Glass. Esta colaboración es un paso significativo hacia la creación de un producto que no solo sea funcional, sino también accesible para el consumidor.
La influencia de la inteligencia artificial en el desarrollo actual
Brin también mencionó cómo la llegada de la inteligencia artificial generativa ha transformado las posibilidades de las gafas inteligentes, haciéndolas más viables y atractivas para el mercado actual. En su opinión, cualquier científico informático debería estar involucrado en el desarrollo de la inteligencia artificial en este momento, ya que es un campo en constante evolución que ofrece oportunidades sin precedentes. Su regreso a la oficina de Google en Mountain View, California, demuestra su compromiso con el avance de la tecnología y su deseo de contribuir a proyectos innovadores como Gemini, un modelo de generación de video que está en desarrollo.