Tesla ha presentado un nuevo paquete de compensación para su CEO, Elon Musk, que asciende a la impresionante cifra de $1 billón. Sin embargo, las metas establecidas para que Musk acceda a este pago parecen ser menos ambiciosas que las promesas realizadas en años anteriores. Este acuerdo se someterá a votación de los accionistas en noviembre, lo que genera expectativas sobre el futuro de la compañía y su capacidad para cumplir con estos objetivos.
Metas y expectativas del nuevo acuerdo
El paquete propuesto por la junta directiva de Tesla indica que, si se cumplen todos los objetivos, la empresa podría convertirse en “la compañía más valiosa de la historia”. No obstante, las metas que Musk debe alcanzar son más accesibles que sus anteriores afirmaciones. Por ejemplo, Musk había declarado que Tesla podría producir 20 millones de vehículos eléctricos anualmente para 2030. Ahora, el objetivo se ha ajustado a entregar un total de 20 millones de vehículos para 2035, lo que parece más realista considerando el historial reciente de la compañía.
Hasta ahora, Tesla ha vendido 8 millones de vehículos. Aunque las ventas han disminuido, la producción se mantiene cerca de 2 millones de unidades por año. Este ajuste en las expectativas podría ser un reflejo de una recalibración estratégica de la empresa, que ha enfrentado desafíos significativos en su crecimiento.
Compromisos previos y nuevas promesas
Elon Musk ha sido conocido por hacer promesas audaces, como la de tener un millón de robotaxis en circulación para 2020. Sin embargo, a medida que nos acercamos a 2025, Tesla apenas ha comenzado a probar un servicio de robotaxi en Austin, Texas, con un número limitado de vehículos. Para acceder a su compensación completa, Musk debe ayudar a Tesla a alcanzar un promedio de un millón de robotaxis operando comercialmente durante tres meses consecutivos. Este objetivo, aunque significativo, presenta matices, ya que incluye vehículos de propiedad de clientes, algo que Musk había prometido pero que aún no se ha concretado.
Además, la junta directiva ha establecido que Musk debe entregar un millón de “bots” como parte del acuerdo. Sin embargo, este objetivo también ha sido diluido en comparación con las afirmaciones anteriores sobre la producción de robots. La compañía define “bots” de manera amplia, lo que podría incluir cualquier producto que utilice inteligencia artificial, excluyendo los vehículos de Tesla.
El futuro financiero de Tesla y los requisitos de Musk
Uno de los aspectos más desafiantes del nuevo paquete es que Musk debe ayudar a Tesla a alcanzar una valoración de $8.5 billones, un objetivo que supera considerablemente las proyecciones actuales de la empresa. Además, se le requiere aumentar los ingresos a $400 mil millones anuales, un salto monumental respecto a los $17 mil millones obtenidos el año pasado. Estas metas financieras reflejan la ambición de Tesla de liderar no solo el mercado automotriz, sino también el tecnológico.
Por último, la junta directiva ha solicitado a Musk que trabaje en un plan de sucesión para su rol como CEO, lo que lo vincula a la empresa por al menos 7.5 años. También se ha mencionado la necesidad de que su participación en esferas políticas disminuya de manera oportuna. Este acuerdo, aunque desafiante, podría ser un reflejo de la confianza de la junta en la capacidad de Musk para guiar a Tesla hacia un futuro brillante y próspero.
